La historia de Glenn y Buzz, el perro ciego y su amigo guía
No sólo las personas podemos servir como ayuda a otros de nuestra especie, los perros también. Ya hemos visto historias en las que un animal ayuda a otro, pero no dejan de sorprendernos estos fieles animales. No importa la raza a la que pertenezcan ni el lugar en el que hayan vivido, ellos parecen comprenderse y saber que se necesitan al instante con tan solo mirarse.
Glenn es un Jack Russell ciego de unos 9 años, y Buzz es de raza Staffordshire Bull Terrier y tiene aproximadamente 10 años, hasta aquí todo podría parecer normal, pero lo cierto es que la historia de estos dos animales va más allá. Ambos son una pareja de perros callejeros abandonados en Reino Unido y que han formado un vínculo imposible de romper. Buzz es el guardián y guía de Glenn y no pueden estar separados el uno del otro. Ambos se encuentran en el Centro de rescate Stray Aid en Coxhoe, Durham, y a pesar de que han intentado conseguirles un hogar definitivo, cuando se separan los animales presentan ansiedad y mucho nerviosisimo, por lo que están inmersos en encontrar una casa en la que puedan hacerse cargo de ambos animales.
La historia de estos dos amigos de cuatro patas ya ha dado la vuelta al mundo en los últimos días y resulta impresionante el vínculo que puede formarse entre dos perros, que no pertenecen ni siquiera a la misma raza, y que uno de ellos, Buzz, es considerado una raza potencialmente peligrosa (PPP). La familia que buscan paa ellos es, lógicamente, una compuesta por gente mayor que pueda darles el tiempo y cariño que estos dos abuelos se merecen, sin agobios ni situaciones de estrés. Estamos seguros de que estos dos perros no terminarán sus días en el Centro y conseguirán una familia a la altura.
https://youtu.be/TcsRQGeFukQ